jueves, julio 06, 2006

Estar

¿Donde vivo? ¿Donde aparezco? ¿En mi conciencia? o ¿En mi relación con otros?
Muchas veces pienso quien soy, soy el que piensa ser o el que nace en el hacer. En muchos casos tiendo a predecir mis acciones en situaciones ideales y en muchas ocasiones esas ficciones se transforman en realidad, en otras no.
¿El campo de acción de esas ejecuciones es mi realidad? ¿Soy ese? ¿Pero cual de los dos? ¿El que pienso ser o el que hace? Quizás soy los dos, o más que eso. En ese mundo de incertidumbre, necesito conversar.
El conversar y asociarse en redes comunicativas me permite trasladarme y generar la encarnación concreta de mi existencia en el mundo.
Sincronizándome en armonías oscilatorias mental y relacionalmente.
Soy dinámico. Aparesco y desaperezco, estoy y no estoy, soy quien me hago cargo de la vida mientras la vivo y por eso quiero vivir con la convicción que la vivo al máximo.
Al Durar poco, en un proceso continuado, anulo toda posibilidad de reduccionismo analítico de mi existencia.
Nuestra raíz de la inteligencia es estar en el mundo y manejarse en el mundo. Es una condición pre-lingüistica. El lenguaje se transforma en la punta del iceberg de nuestra relación con nosotros mismos.
Establecemos una mirada sensorio motriz en el ambiente en un mundo donde el estar cambia permanentemente.
Por lo tanto, cada uno se cuenta su historia o ¿Alguien está equivocado?

3 comentarios:

Laucha dijo...

Para rematar el tema del lenguaje que quedó en discusión el post "Verdad", respondo a la última pregunta con un "en parte si". Lo voy a ver desde dos paradigmas. El del pensamiento complejo (epistemologia) nos enuncia que la realidad contempla fenómenos complejos y continuos que tienden a la no linealidad. Nuestro lenguaje común no trabaja con la complejidad, la reduce y la secuencia. En el pensamiento complejo las representaciones/replicaciones son de parcelas de la realidad y se codifican en un lenguaje que codifique su complejidad. En el paradigma cognitivista (psicología), nuestra experiencia brota de una dimensión tácita, emocional, continua, analógica, de procesos en paralelo; y se integra a un nivel explícito, discursivo, secuencial, digital, discreto, de procesos seriales/secuenciales. El hablar es tratar de reducir experiencias analógicas a digitales. Cuando hablamos de "temor", con la misma palabra nos referimos a miles de experiencias diferentes de las cuales dificilmente podríamos siquiera establecer su inicio y final. Eso con lo del lenguaje.
Ahora, curiosamente, el conflicto de desde donde emerge el "yo" es una discusión que se da dentro de la escuela constructivista de psicología, parcialemente escindida entre posracionalismo y terapia sistémica. Los primeros sostienen que el self aparece en la narrativa que yo me hago dentro de mi cabecilla. Los segundos sotienen que el yo está tan afuera como adentro y le dan un rol más determinnate a las relaciones sociales.
Lo curioso es que esta discusión se trata de disolver con Varela. Para Varela el yo está bastante segregado, a la vez que corporizado. El yo está tan manipulado por nuestros cuentos propios, a la vez que la mente a ratos "se echa a correr", y actua inconscientemente. De la misma forma el yo es sólo una aparición; emerge. Tal cual como el mundo desde la optica heideggeriana. Varela es interesante, señor, le recomiendo leerlo. Yo recién comienzo a analizarlo.

Elias dijo...

Sincronizándome en armonías oscilatorias mental (neuronales como una partitura musical) y relacionalmente. Eso es de Varela. Desde hoy Varela es el tema. Este artículo nace luego de observar una entrevista de Eric Goles a Varela el año 2000. Estas divagaciones son parte del resultado de esa proyección.
Así acogo la sugerencias y me parece muy espectacular.
PD: Neuro Ormeño

Elias dijo...

¿No me digas?